Una tarjeta de crédito es como una varita mágica financiera que te permite comprar sin necesidad de llevar efectivo en el bolsillo. Imagina que tienes un amigo generoso que te presta dinero para tus compras y luego tú le devuelves ese dinero en cuotas. Así funciona una tarjeta de crédito.
¿Cómo funciona?
Compra ahora, paga después: Cuando usas una tarjeta de crédito, no pagas en el momento de la compra. En cambio, el banco o la entidad financiera te presta el dinero para que compres lo que necesitas.
Límite de crédito: Cada tarjeta tiene un límite de dinero que puedes gastar. Es como un tope máximo. Si compras algo, ese monto se resta de tu límite de crédito.
Cuotas o pago total: Al final del mes, recibirás un resumen con todas tus compras. Tienes dos opciones:
Pago total: Pagar todo el monto gastado antes de la fecha de vencimiento. No pagarás intereses.
Cuotas: Si no puedes pagar todo, puedes elegir pagar una parte y el resto en cuotas. En este caso, se te cobrarán intereses por el préstamo.
Tipos de tarjetas de crédito
Clásicas: Son las más comunes, como Visa, Mastercard o American Express. El dinero prestado se devuelve en un mes (a veces dos). Si no tienes saldo, se cobrarán intereses.
Oro y platino: Funcionan igual que las tarjetas convencionales, pero con una línea de crédito mayor y servicios adicionales. Son para clientes VIP o usuarios frecuentes.
Revolving: Los pagos se aplazan automáticamente. Pagarás una cantidad fija al mes en lugar de todo de golpe. Cuidado con los altos intereses.
De puntos: Ofrecen ventajas como programas de puntos para viajes, descuentos, etc.
Virtuales: Sin soporte físico, ideales para compras en línea.
Comerciales: Emitidas por establecimientos, no bancos. También llamadas tarjetas de compra.
Sugerencias: Usa con responsabilidad: No gastes más de lo que puedes pagar.
Paga a tiempo: Evita intereses y mantén un buen historial crediticio.
En MisGastosFijos te ayudamos a gestionar mejor las compras con tus Tarjetas de Crédito.